La obra de Benjamin Martin, arranca desde el año 1840 y estudia los temas centrales del desarrollo del movimiento obrero en España: el predominio del anarcosindicalismo en la industrializada Cataluña, el crítico papel jugado por el socialismo, el fracaso de los esfuerzos por establecer un sindicalismo católico, y las dificultades, marcadas por el contexto socioeconómico y político, para la formación de un movimiento sindical moderno. Su exhaustivo análisis hacen de esta obra una historia crítica necesaria para conocer mejor la historia contemporánea de España.